Sobre nosotros

 

Nuestra decisión de comprar una "finca familiar" en España se tomó el día de Navidad de 1997 con toda la familia. Varios meses siguieron con innumerables investigaciones en varios agentes inmobiliarios serios y también menos serios en España. Se ha escrito innumerable literatura sobre las diferentes regiones costeras de España. Se cuestionó a los amigos y conocidos: todos tenían un "consejo secreto" diferente, por supuesto. En la costa atlántica el clima era demasiado duro para nosotros, en la zona de Marbella los precios eran demasiado altos y en la zona de Denia era demasiado "alemán" para nosotros. Finalmente aterrizamos más por casualidad en la Axarquía. La proximidad al aeropuerto de Málaga, el clima y el paisaje bastante verde de este lugar del sur fueron los factores decisivos al final de las innumerables discusiones.


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En septiembre de 1998 toda nuestra familia visitó Cómpeta por primera vez y todos nos convencimos del encanto de la zona. Al final de nuestras vacaciones habíamos decidido comprar una finca después de algo más que discusiones acaloradas. Firmamos el contrato de compra unos días después en Alemania y ya pensábamos que éramos orgullosos propietarios de una finca española "real". Por desgracia, los vendedores de la casa no se pusieron de acuerdo, así que tuvimos que averiguar unos meses más tarde que la casa que nos ofrecieron no estaba en venta al final. Entre finales de 1998 y mayo de 1999 nos pusimos en contacto probablemente con todos los agentes inmobiliarios (en aquel momento había muchos menos que hoy) de esta zona para encontrar el "adecuado" para todos nuestros gustos. Con seis adultos, un niño de casi un año en ese momento, un perro y un gato, no fue tan fácil llegar a un denominador común. Uno u otro agente inmobiliario estaba ciertamente muy molesto con nosotros durante este tiempo. Sin embargo, todos fueron muy amables y agradables y sin un agente no es posible o sólo muy difícil y luego a menudo muy arriesgado - lo que no significa necesariamente que debe ir mejor y mejor con todos los agentes. Después de haber comprendido poco a poco que los relojes van de forma diferente en España, pudimos aceptar el conjunto, para nosotros una situación en parte insatisfactoria de un día para otro cada vez más y poco a poco incluso hacer amigos.



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Luego llegó mayo de 1999, lo que debería cambiar el futuro de toda nuestra familia: María, Line nuestro mientras tanto desafortunadamente fallecido gato y yo volamos como una especie de "vanguardia" a Cómpeta para ver todas las ofertas posibles en el sitio de antemano. 5 días después llegó la segunda parte y otros 2 días después el resto de nuestra familia se unió a nosotros.

Al principio visitamos las casas junto con diferentes agentes inmobiliarios, después sólo dejamos que nos describan el camino a las casas. Hemos mirado una docena de casas: Uno era demasiado pequeño, el otro estaba demasiado lejos del siguiente pueblo, el siguiente no tenía acceso a la finca, no había electricidad ni agua, no había piscina... Teníamos algo de qué quejarnos en todas partes y cuantas más casas veíamos, más difícil se volvía el asunto. Con nuestro coche de alquiler hemos recorrido casi 3.000 km en estas 3 semanas, y eso casi exclusivamente por caminos de tierra que estaban muy mal en ese momento en comparación con los de hoy!

Finalmente encontramos nuestra nueva casa de vacaciones, fue por así decirlo "amor a primera vista". Los propietarios no sólo fueron increíblemente amigables y de mente abierta, sino que también mostraron mucho gusto en reconstruir y amueblar su casa. Ella tenía un pulgar verde y él tenía mucha imaginación y artesanía. Pasaron unos días hasta que nuestra familia finalmente acordó la compra, ya que la pequeña finca era mucho más cara de lo que nuestro "límite" establecido permitía. Estábamos y seguimos estando convencidos de nuestra elección; la casa no está en venta aunque probablemente podríamos conseguir más del doble del precio a estas alturas.


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En junio de 1999 los representantes masculinos de nuestra familia de edad madura condujeron a España en un gran autobús VW - lleno hasta los topes - y un viejo R 5 - también lleno hasta los topes. 28 horas de conducción muy agotadora (velocidad máxima inferior a 100 km/h) quedaron atrás, pero aún así fue muy divertido. Transportamos muebles y otros utensilios a nuestra futura casa en España; además, la cita con el notario debería tener lugar durante estas cortas vacaciones. Efectivamente, todavía había algunas dificultades con el notario, el banco y el agente inmobiliario, cosa que nos molestaba mucho en aquella época, pero hoy en día sólo nos reímos de ello, ya que sabemos que esto es completamente normal en Andalucía. Como ya se ha mencionado: en España, los relojes funcionan de manera diferente y si miramos a nuestro alrededor, no somos los únicos que tenemos este problema.

Todos juntos, pero la mayoría de las veces en pareja, pasábamos regularmente las vacaciones de los años siguientes en nuestra pequeña finca y ya esperábamos con ilusión las próximas vacaciones antes de partir. De vez en cuando nos resultaba más difícil tener que volver a Alemania, sobre todo porque también encontramos algunos amigos muy agradables en Cómpeta.

Para no tener que dejar la casa vacía, ya habíamos decidido, inmediatamente después de la compra, dejar nuestra pequeña finca a buenos amigos o conocidos de vez en cuando durante las épocas en que desgraciadamente no podíamos estar allí. La mayoría de las veces, sin embargo, la casa estaba ocupada por nuestra familia, ya que todos nuestros padres son pensionistas y por lo tanto tenían y tienen una cantidad de tiempo relativamente grande.

 

Las reacciones de nuestra familia, amigos y conocidos fueron muy positivas en todo momento, todos deliraban por la zona y la mayoría de ellos querían volver. Por casualidad conocimos a una pareja española, dueños de una pequeña agencia de viajes, y al principio sólo hablamos en broma de una posible cooperación. Sólo por diversión nos pusimos serios y poco después ofrecimos más casas de vacaciones y fincas exclusivamente en la zona de Cómpeta, Torrox, Sayalonga y Sedella a través de Internet como agente de esta pareja. Como ocurre a menudo en la vida, las sociedades se rompen a veces innecesariamente, y así ocurrió también casi 5 años más tarde en este caso. El primer período después de esta separación involuntaria fue difícil, pero lo superamos y ahora somos uno de los mayores corredores de casas de vacaciones de esta región - nuestros antiguos socios han dejado ahora su agencia de viajes y el negocio de alquiler de casas de vacaciones. Además, desde 2015 hemos estado ofreciendo una serie de casas de vacaciones seleccionadas para la venta en cooperación con un agente inmobiliario local. Aquí nos hemos especializado en casas de vacaciones que son fáciles de alquilar y por lo tanto ofrecen al comprador un ingreso de la inversión a muy corto plazo si así lo desea. Una parte de nuestra familia ha estado viviendo con los niños permanentemente en Andalucía desde principios de 2000 y nosotros mismos hemos estado pasando casi seis meses al año en la hermosa Andalucía durante muchos años. Por eso podemos dedicarnos a una parte de nuestros clientes personalmente en el lugar.

 

Por supuesto, esto también nos facilita enormemente la inclusión de nuevas propiedades en nuestra oferta y la información proporcionada a nuestros clientes es, por consiguiente, mucho más actualizada y completa que la de la mayoría de nuestros competidores en el mercado. Así, durante nuestras estancias en el sur de España tomamos regularmente nuevas fotos de los objetos de vacaciones ofrecidos y de los alrededores o de toda Andalucía (para nuestra Andalucía-Online-Travel-Guide) y en consecuencia mantenemos nuestras páginas de Internet casi a diario. Además, normalmente nos reunimos al menos una vez al año con los propietarios de las casas de vacaciones en el lugar para discutir juntos lo que se puede mejorar. Ya desde 2007 somos miembros de la Asociación de Agencias Alemanas de Casas de Vacaciones (www.vdfa.de) y desde mayo de 2014 también somos activos como asesores en el presidium del VDFA.

 

Los viajes de Andalucía a Alemania y de Alemania a Andalucía son, en efecto, siempre como pequeñas mudanzas, pero ya nos hemos acostumbrado en todos estos años. También Dalí, a quien llevamos a finales de 2005 de un antiguo refugio de animales en Cómpeta (ver foto arriba a la izquierda), el pequeño Fips (ver foto arriba al medio), que nos "adoptó" a principios de 2009 y nuestro abuelo Bisquit (ver foto arriba a la izquierda - mientras tanto con 18 años desafortunadamente ciego y sordo, pero aún así absolutamente amante de la diversión), a quien conseguimos a finales de 2011 al principio sólo como perro de acogida, pero que se convirtió en un completo "miembro de la familia" después de unas pocas semanas ya, se llevan muy bien con nuestra vida nómada, porque a los tres les gusta sorprendentemente conducir un coche.   Pero a veces miramos atrás un poco con nostalgia a la época en que sólo teníamos vacaciones en España y sólo nos recuperábamos, porque hoy en día siempre hay otro trabajo que hacer durante el tiempo que estamos en Andalucía. Pero hoy en día, la diversión sigue siendo tan grande como al principio y ¿a quién no le gusta trabajar allí donde otros pasan sus vacaciones?